Gaucín es tan diverso y jugoso, que lo mismo permite que hablemos de él por sus hechos históricos y personajes que han pasado a la posteridad, como es propicio para que desgranemos un rosario de anécdotas. A ello he dedicado alguno de mis trabajos, así como a mostrar la fauna humana que quedó fijada en sepia en las viejas estampas. Voy, ahora, a tributar en algunos artículos un pequeño homenaje a personajes de nuestro pueblo que todavía discurren por sus calles y que a todos nos suscitan gratos recuerdos. Empiezo mostrando doce personajes emblemáticos. Os prometo más en próximas entregas.

AMIGAS

Ana Gonzalez, la mujer de José Cuchara, y Maria Rondón, la Rondona, viuda de Domingo Chirle, amigas y vecinas, alegran las calles de nuestro pueblo en sus constantes paseos y desplazamientos a comercios y supermercados, siendo retrato vivo de lo más sano de nuestras mujeres.

AVILES Y LOS GITANOS

Cuantas historias saldrían de la Esquina Matías, feudo de Paco Avilés -vivo retrato de su recordado padre, prototipo de antiguo y respetado tratante-, junto a su escuderos Joselín y Andrés el de “Piché”, representantes hoy de tantos y tantos gitanos de bien que siempre han habitado en nuestro pueblo.

EL TAPERO

Antonio Ramos, simpático personaje de nuestro éxodo, actualmente en el Casino del Puerto Banús, en Marbella, nos muestra orgulloso a su hija, en la puerta de la Iglesia, en donde todos los años recibe con devoción al Santo Niño.

EN EL JUZGADO DE PAZ

Que tiempos aquellos en que Gaucín era Cabeza de Partido, con sus Notarios, Registradores, Jueces de Primera Instancia e Instrucción, Comarcales y toda la cohorte de Forenses, Secretarios, Oficiales, Auxiliares, Ordenanzas y Alguaciles (Eusebio, Zulueta de Haz, Melchor, Mateo Díaz, Sánchez Shilfer, Bascuñana, Juan Gavilán, Pérez Sanz, Obdulio Duro Duro, Juan Moyano, Rafael Santaolalla, Benito, Joselito…). Ahora, las funciones judiciales se reducen al Juzgado de Paz, servido muy dignamente por Paco Domínguez y Petri Medina.

FERNANDITO

Aún conserva su vitalidad y no es raro verlo dar paseos por el Puente de la Carrasquilla, ahora ayudado de su bastoncillo. Que tiempos aquellos de “la sindical”, junto, entre otros, a Manolito Serrano, Damián Jiménez, Juan Hidalgo y Francisco el Pregonero.

GODY

Fundador de la marca comercial “Gody”, Rafael Godino, emigró de Gaucín a Ronda donde estableció su primer comercio de Pastelería, posteriormente transformado en Zapatería, a cuyas puertas lo vemos, junto a su hermana Anita y a Isabela y mi primo y cuñado Teodoro. Posteriormente se trasladó a Málaga donde ha creado un emporio en su especialidad, lo que es orgullo para nuestro pueblo.

LA CHURRERA

Sucesora de una de las ocupaciones con más tradición en nuestro pueblo. Siempre fueron célebres los churros, en especial los buñuelos, de la Curra, hija de señor Chiquilitré. Hasta ahora nos los ofrecía en el clausurado Mercado del Corral del Concejo la amiga Rosa, y esperamos volver a disfrutar de sus ricas roscas, en un nuevo local que no debería faltar en nuestro pueblo.

LOS GUIRIS

Nueva savia de nuestra convivencia, que han traído vitalidad a nuestro entramado social y económico, tan afectado por el éxodo de los cincuenta. Ha tenido la virtud de saber conservar las esencias de nuestra arquitectura milenaria. Jorge el Cubano, en la fotografía, me recuerda el alambique de D. Santos y me parece que fue el primer extranjero que nos escogió para convivir con nosotros. Él, junto a Willians, Felix y Silvia, Osborn, Wuaterhause, Teresa Tamayo, Nozomi y tantos otros artistas, escritores y extranjeros de bien están echando raíces en su nueva tierra, que es la nuestra, la de todos.

MARGARITA ROMÁN

Una nonagenaria gaucinense, Margarita Román Cantizano,  enamorada del Santo Niño Dios de Gaucín, cuyas huellas ha seguido, no sólo espiritualmente, sino de manera real, indagando posibles escondrijos, visitando pueblos lejanos, siempre con el ánimo de encontrar la bendita Imagen de nuestra ancestral tradición.

MARIA LA DEL PINO

Quizá sea de las personas mayores, una de las más emblemáticas, por sus muchos años de bien hacer, de amorosa entrega a los suyos y por su simpatía con los demás. Muchos niños de Gaucín recordamos los chapuzones y travesuras en su alberca, la mayoría de nosotros tendremos motivos para añorar la solícita atención que siempre nos ha mostrado y será siempre símbolo de amabilidad.

MIGUEL CALVENTE

Rapsoda del pueblo, anécdota viva y memoria acertada de sucesos curiosos y poco conocidos, siempre contados con gracejo; narrador de matices y costumbres gaucinenses; hombre invariablemente amable, tan agradable en su conversación como atrayente en la trova de su vida.

MI PRIMA MARIA JOSEFA

María Josefa Martín Rodríguez, testigo permanente, con sus más de noventa años, de la vida social de nuestro pueblo y, en especial, de las vicisitudes de la luz eléctrica en Gaucín, desde que su abuela Maria obtuviera en 1889 la concesión de la distribución en la comarca, de quien pasó a su padre y de éste a su viuda, Carmen Rodríguez, hasta las actuales propietarias, de las que sobrevive Maria Josefa. En mis reencuentros con Gaucín, no descanso hasta que me reavivo con su conversación, siempre llena de recuerdos, no sólo de nuestros antepasados comunes, sino de los más pequeños detalles de nuestro acervo.